La forma cónica de la broca transversal ayuda a canalizar la energía de perforación directamente en la roca, aumentando la efectividad de cada impacto. Este diseño también ayuda a reducir la probabilidad de desviación de la broca, asegurando que el pozo permanezca en la trayectoria prevista para operaciones de perforación precisas.

El mantenimiento adecuado de la broca transversal cónica es esencial para maximizar su rendimiento y extender su vida útil. Esto incluye inspecciones periódicas para comprobar si hay desgaste, daños y alineación adecuada, así como el afilado o reemplazo oportuno de la punta de carburo cuando sea necesario.

La naturaleza versátil de la broca transversal cónica permite su uso en una amplia gama de aplicaciones de perforación, desde minas y canteras hasta construcción e ingeniería geotécnica. Su capacidad para manejar diversos tipos y formaciones de rocas lo convierte en una herramienta valiosa para muchas industrias.

Las puntas en cruz en T están disponibles en diferentes tamaños, desde 28 mm hasta 41 mm. Por lo general, el ángulo cónico de la broca es de 7°, 11° o 12°, dependiendo de los requisitos de la plataforma de perforación. La forma de la broca suele ser en forma de cruz con cuatro filos para una perforación eficiente.